El bambú es una planta común de jardín. Es posible que lo hayas visto crecer solo o como parte de un arriate. Incluso puede que hayas pensado que el bambú es un árbol.
Pero ¿Es el bambú realmente un árbol? ¿O es en realidad una hierba? Averigüémoslo en esta entrada.
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El bambú es una hierba, no un árbol
Así es, el bambú es un tipo de hierba y en general nunca crece más que 2 metros. Hay muchos otros tipos diferentes de hojas o tallos (del mismo árbol) que puedes usar como fertilizante para su jardín o sus plantas.
El bambú es una planta muy versátil y es un excelente forraje para animales. Por lo general, se utiliza como forraje en países con climas cálidos y húmedos.
Es un buen sustituto del algodón porque tiene mucho alto contenido de fibra. El bambú es la hierba más larga del mundo.
Por lo general en un día de trabajo como éste se pueden recoger entre 50 y 60 metros de bambú y con eso basta para hacer dos o tres forrajes para animales.
Tanto los árboles como las hierbas son plantas
La respuesta está en el hecho de que el bambú es en realidad un tipo de hierba. La hierba es uno de los tres grupos principales de plantas, junto con los árboles y las hierbas. La diferencia entre los tres se basa en gran medida en la altura, siendo los árboles altos, las hierbas cortas y las gramíneas un punto intermedio.
El bambú pertenece al grupo de las hierbas. Al igual que otros tipos de hierbas, tiene raíces, tallos y hojas. También produce flores que se convierten en semillas tras ser fecundadas por el viento o los insectos.
Los árboles necesitan la luz del sol para crecer; las plantas como el bambú pueden sobrevivir sin luz solar directa, pero les va mejor con ella porque necesitan la luz para producir alimentos mediante la fotosíntesis (el proceso en el que la energía de la luz se convierte en energía química).
El bambú tiene hojas
Quizá hayas notado que la palabra «bambú» se utiliza como un término general para describir plantas con tallos largos y huecos. Esto se debe a que el bambú se suele considerar erróneamente un árbol.
En realidad, los bambúes son hierbas que crecen en grupos a partir de rizomas -un tipo de tallo subterráneo- y producen hojas verdaderas (no agujas). También comparten algunas características con otras hierbas: las raíces del bambú se unen como los zarcillos de plantas como el maíz o la uva; tiene nodos, que es donde se produce el nuevo crecimiento; y puede cosecharse varias veces a lo largo de su ciclo vital.
Pero hay rasgos exclusivos de los bambúes que los diferencian de otros tipos de hierbas: no forman raíces secundarias (dependen únicamente de sus rizomas), crecen hacia la luz y no hacia la sombra, son monocotiledóneos (producen una sola hoja de semilla) y desarrollan nodos a intervalos regulares a lo largo de su longitud en lugar de grupos en la base o en la parte superior.
El bambú tiene raíces
El bambú es una planta herbácea, no un árbol. Eso significa que es una hierba. Al igual que otras hierbas, el bambú tiene raíces que se adentran en el suelo y ayudan a proporcionar nutrientes a la planta.
Pero, a diferencia de los árboles, que tienen raíces que se adentran en el suelo, las del bambú son poco profundas, normalmente a unos 10 centímetros de profundidad.
Los brotes de bambú son comestibles
En China, los brotes de bambú se consideran un manjar. Son pequeños y tiernos, con una textura parecida a la de los espárragos.
Los asiáticos los utilizan de muchas maneras: crudos (en ensaladas), hervidos o al vapor como parte de salteados, encurtidos para usarlos en sopas y guisos, o conservados con sal y jengibre para aperitivos.
Los árboles están arraigados al suelo
El bambú no es un árbol. Se trata de una planta herbácea y no tiene raíces ancladas al suelo, sino que crecen en lo profundo del suelo o en el subsuelo.
Las raíces de los árboles están arraigadas al suelo porque necesitan agua y nutrientes para nutrirse. Sin embargo, las raíces del bambú se hunden muy profundas en el pulmón de la tierra para recibir oxígeno y aire fresco, ya que los roedores pueden llegar hasta ellos si se encuentran demasiado cerca del nivel del suelo.
Las raíces de un bambú crecen hasta 20 centímetros al día y se extienden entre 15 a 20 metros debajo de la superficie del terreno; además, son huecas y están llenas de aire.
Para llevar, el bambú es una hierba
Los bambúes son un grupo de hierbas leñosas de la familia de las poáceas, subfamilia Bambusoideae. El grupo ha sido incluido en varias ocasiones como una subfamilia dentro de Bamboo se considera un árbol
Las especies son en su mayoría hierbas leñosas gigantes (con algunas formas de crecimiento arbustivo y arbóreo), y son nativas de climas tropicales y subtropicales. Tienen hojas largas y estrechas que se expanden después de la floración en forma de tubos huecos con extremos cerrados. Muchas especies de bambúes crecen en macizos o arboledas, que pueden crear barreras de privacidad o vallas vivas para los jardines.
Los bambúes se utilizan como material de construcción (como postes), alimento (por ejemplo, brotes), medicina (por ejemplo, tallos) y producción de papel; también pueden utilizarse como material natural para suelos o instrumentos musicales como el banjo o la flauta biwa hōshi.
Conclusion
La conclusión es que el bambú es una hierba y no un árbol, aunque su apariencia pueda engañarnos. A diferencia de los árboles, el bambú pertenece a la familia de las gramíneas y se caracteriza por su rápido crecimiento y capacidad para regenerarse rápidamente.
Al saber que el bambú es una hierba, podemos comprender mejor su comportamiento y necesidades, lo que nos ayudará a cuidarlo adecuadamente en jardines o espacios naturales.
Además, al ser una hierba, el bambú no requiere la tala completa para ser cosechado, lo que lo convierte en una opción más sostenible y amigable con el medio ambiente. Es esencial desmitificar la creencia de que el bambú es un árbol, para valorar su verdadero papel como una asombrosa hierba gigante con múltiples usos y beneficios para nuestro entorno.